Se busca prodigar los más asiduos cuidados para el alivio del cuerpo y del espíritu, pues nadie tiene más necesidad solícita que el no vidente, el enfermo y el anciano. Cfr. Const.196 &II.
Ayudar a descubrir, a la luz de Cristo, el sentido de la cruz que transforma purifica y abre a la dimensión salvadora del sufrimiento en el mundo. Cfr. Const.197 &I.